La adicción al vínculo traumático

Salir de una relación abusiva o poner límites a la misma es todo un desafío. Gran parte de esto se debe a lo que se denomina adicción al vínculo traumático. El cerebro de la víctima no solo se acostumbró al maltrato, se hizo adictiva al mismo. Esta dinámica relacional surge como resultado de una historia de abuso emocional o abuso psicológico. Esta condición puede llevar a la persona a buscar relaciones destructivas o relaciones tóxicas con personas que les harán daño. No es casualidad, que personas que tuvieron padres o madres maltratadores, terminen eligiendo parejas violentas.

¿Por qué se habla de adicción?

Varias hormonas generadas en el cuerpo humano están involucradas en la llamada “adicción al trauma” que fortalece o induce el vínculo con el abusador, como la oxitocina, que causa los vínculos y la afectividad; opioides endógenos, responsables del placer, el dolor, la abstinencia y la dependencia; factor de liberación de corticotropina, causando abstinencia y estrés; dopamina – generando antojo, deseo, búsqueda. Con tantos factores neuroquímicos en estados desregulados, es extremadamente difícil para el sujeto modular sus emociones y tomar decisiones (BURKETT; YOUNG, 2012).

Los profesionales de la salud mental pueden ayudar a la persona a desarrollar habilidades para resistir el impulso de buscar relaciones disfuncionales. Estas habilidades incluyen el autocontrol, la regulación emocional, la autocrítica y la autoeficacia. El proceso también puede incluir el uso de recursos comunitarios como grupos de apoyo, terapia de pareja, terapia grupal y otros recursos para ayudar a la persona a lidiar con la adicción al vínculo traumático.

Son muchas las personas que por desconocimiento, presionan a las víctimas del narcisista a cortar el contacto cero con la persona narcisista victimizando al victimario. Esto es contraproducente ya que la persona se encuentra en un proceso de abstinencia a dicho vínculo lo que implica recaer en situaciones de maltrato, violencia y manipulación.

Es por esta razón que la prevención de la revictimización es fundamental para tratar la adicción al vínculo traumático. La educación y el apoyo de profesionales de la salud mental, familiares y amigos pueden ser herramientas útiles para ayudar a la persona a comprender sus emociones y desarrollar una mayor resistencia al impulso de buscar relaciones disfuncionales. Además, el uso de recursos comunitarios como la terapia individual, la terapia de pareja o grupal puede ayudar a la persona a desarrollar habilidades para lidiar con la adicción al vínculo traumático.

Es importante que las personas que se enfrentan a la adicción al vínculo traumático reciban ayuda profesional para aprender a identificar y manejar este tipo de relaciones. Los profesionales de la salud mental pueden ayudar a la persona a desarrollar estrategias para lidiar con las emociones negativas y evitar futuras relaciones tóxicas. Esto puede incluir la terapia, el uso de recursos comunitarios y la educación sobre la salud mental.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *